La contaminación cruzada en laboratorio es uno de los mayores riesgos a los que puede estar sometido cualquier fármaco, medicamento o incluso alimento que esté pasando por un proceso de análisis y supervisión.
La prevención es la medida adecuada con la que evitar la contaminación cruzada farmacéutica, para lo que debemos adoptar ciertas medidas y aprovechar determinados productos para ello.
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¿Qué es la contaminación cruzada en un laboratorio?
Cuando hablamos de contaminación cruzada, normalmente nos basamos en el sector de la restauración, ya que consiste en la transmisión de microorganismos desde un alimento a otro, directa o indirectamente, con efectos perjudiciales.
Por lo general suele pasar cuando manejamos alimentos crudos o cuando se produce una contaminación por microorganismos patógenos en unas condiciones de higiene inadecuadas.
Sin embargo, al hablar de qué es la contaminación cruzada en un laboratorio, extendemos esta situación también a fármacos y medicamentos que pueden estar en procesos de ensayo, análisis o incluso de producción a gran escala.
La contaminación cruzada en un laboratorio farmacéutico puede derivar en un medicamento que no presenta los niveles de efectividad requeridos, con el potencial riesgo que supone para la salud de quienes lo requieren.
También puede ser el origen de una infección que derive en contagio entre más personas, poniendo en riesgo a la población.
Por tanto, estamos ante un aspecto muy importante que debe atenderse con los máximos niveles de higiene, seguridad y protección, con el fin de salvaguardar la salud pública.
Consejos para evitar la contaminación cruzada en un laboratorio
La contaminación cruzada en laboratorio muchas veces se produce a través de los profesionales que trabajan allí, debido a la falta de elementos de protección.
El uso de epis de laboratorio de alta calidad permite prevenir este tipo de contaminación cruzada, ya que evita por completo que el profesional entre en contacto con otros elementos potencialmente contaminados.
Desde guantes de látex hasta monos completos con capucha, la variedad de accesorios de protección para laboratorio que hay disponibles es enorme. Elegir los adecuados y utilizar siempre productos de calidad y completamente higiénicos, permite prevenir problemas como la contaminación cruzada.
Las instalaciones en las que se desarrolla el trabajo también deben estar debidamente preparadas. Esto no solamente sirve en laboratorios, sino que es aplicable para evitar la contaminación cruzada en restaurantes o la contaminación cruzada hospitalaria. El espacio en cuestión debe contar con las condiciones óptimas de higiene, esterilización, ventilación y otros aspectos con los que evitar cualquier tipo de contaminación.
Por último y de forma complementaria, en un laboratorio es posible separar incluso de forma física los procesos de producción, ensayo o investigación, de manera que no haya riesgo de que distintos elementos entren en contacto entre sí.
En muchas ocasiones la contaminación cruzada en laboratorio se produce por hacer muchos pasos seguidos con el mismo material, sin adoptar medidas de prevención adecuadas. Una separación de los procesos impide que se produzcan estas situaciones, sobre todo si hay que cambiar de espacio a la hora de pasar al siguiente nivel del análisis o de la investigación que se está realizando.
